Begoña con su Lomo Litio eléctrico y Roberto con su Smart Para híbrida se han lanzado a la aventura de visitar las ciudades de Londres y París. Y, además, viajar de una ciudad a otra con sus handbikes Stricker.
Les acompañaban Argiñe (la esposa de Roberto), su amigo Pedro y el sobrino de éste, Unai. Así fue su ‘súper aventura’:
Estuvimos alojados en un hotel al sur de Londres y teníamos alrededor de 6 kilómetros hasta el centro. Hacíamos el recorrido en bicicleta y en las handbikes sin ningún problema. (Eso sí, mis amigos compraron las bicis de segunda mano en Londres y no eran de muy buena calidad, los cambios iban mal y los frenos parecido).
Nos sorprendió gratamente que es bastante fácil llegar al centro en una ciudad tan grande. Hemos estado dos días visitanto los sitios más emblemáticos de Londres, como el Palacio de Westminster, Buckingham Palace, la Torre de Londres, etc. El tiempo genial… la fama de Londres nos ha respetado.
Para llegar a París cogimos un ferry que nos llevó hasta Dieppe. El primer día en territorio francés hicimos una ruta de 53 kilómetros hasta Gisors, con bastante calor. Eso hizo que la etapa se nos hiciera también un poco más dura. Además ha sido por carretera.
El segundo día el recorrido fue mayor de lo esperado, unos 77 kilómetros. Begoña agota las dos baterías del Lomo Litio y yo he necesitado tres baterías en la Smart semieléctrica. Hemos alternado zonas de carretera con campos de trigo. El final ha sido más plano de lo esperado y, aunque estamos cerca de París, no ha habido demasiado tráfico.
Al día siguiente ya llegamos a París, donde estuvimos tres noches, visitando un poco la ciudad. Eso sí, sin las handbikes es complicado, sobre todo por los empedrados de París. Ha merecido la pena esta súper aventura, superándonos una vez más ante la adversidad.
El viaje, en general, ha tenido más cuestas de las esperadas y la ruta real es complicada si vas en silla de ruedas. La parte francesa está mejor señalizada y conservada que la británica, pero con muchas cuestas.